miércoles, 3 de diciembre de 2008

"Abdú no sabe quién acabó con su futuro"

Soy Chocolate y esta vez os voy a comentar este artículo de "El País". Comienza con el testmonio de Abdú; un chico de 18 años del Congo. Abdú se encontraba fuera del pueblo mientras los rebeldes tustis del general Laurent N'Kunda lo destrozaron y masacraron. Cuando escuchó tiros se escondió;y no salió hasta que pararon y se fueron. Al volver, no encontró otra cosa que desolación, muerte, destrucción....Se encontró a toda su familia muerta y ni siquiera sabía si los artífices de aquello habían sido los rebeldes o el furioso Ejército regular en retirada. Después lo mandaron ir al campo de refugiados Kigali I, en Goma.
Si bien Abdú no tenía ya suficiente con la hambruna, la ausencia de productos farmacéuticos y demás, ahora también se ve obligado a contemplar los cuerpos asesinados de sus seres queridos como tantos otros en su misma situación.
No entiendo como esto puede dar lugar únicamente a indiferencia en los políticos que de verdad podrían hacer algo por ellos. Considero lamentable el hecho de que cada uno se interese únicamente por su propio bien sabiendo de la mala situación en otros sitios.
Todo el este del Congo es asolado por los 6.000 hombres de N'Kunda, que buscan la explotación de este país. Se supone que 17.000 cascos azules y el Ejército del Congo luchan para protegerlo pero ha quedado comprobada su infecacia ante este gran conflicto. Los soldados ni siquiera reciben salario (se pierde en las manos de sus oficiales) y como no disponen de un lugar seguro en el que dejar a sus familias a salvo se las llevan con ellos a los campos de combate.
La Monuc es una medida tomada para acabar con todo este asunto, pero también falla puesto que sus miembros no se interesan por la labor. La ONU tampoco recibe muchos agradecimientos de los afectados.
Si todos nos interesáramos de verdad por hacer del mundo un sitio mejor, muchas cosas como esta imagen de abajo cambiarían.

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